Comic Boliviano #8


Leyendas Lunares

La infanta: Leyendas Lunares #8. Yecid Abal Camargo; Armin y Alan Castellón, Clay Caballero. Colección Monográfico, Pseudo gente Editores, Cochabamba, 2012.

Esta octava publicación de la colección monográfico, en pequeño formato, contiene dos historietas al estilo manga: la leyenda japonesa “La luna y el conejo” y en el reverso: la leyenda guaraní “La yerba mate” recopilada por Eduardo Galeano. El trabajo de adaptación de estas pequeñas leyendas al formato de cómic y el dibujo sencillo pero efectivo le prestan una atmósfera única a estas historietas, presentadas en blanco y negro. Ambas tienen como protagonista a una Luna con poderes y atributos mágicos, uniendo tradiciones distantes frente a una temática común. Puede parecer que un cómic de estas características sea apenas un “detalle”, sin embargo, cabe destacar varias cosas que juegan a favor: a) el texto está bien escrito, a pesar de su brevedad, b) las imágenes, algo naif y delicadas, son aptas para todo público, c) el cómic no pretende ser más de lo que es, y relata su historia con efectividad sin molestas segundas partes que muchas veces no llegan a realizarse. Todos puntos a tener en cuenta si se desea tener un amplio alcance.

periferica021

Periférica Blvd. Adolfo Cárdenas, Susana Villegas, Álvaro Ruilova, Oscar Zalles. Editorial 3600. Espacio Simón I. Patiño, La Paz, 2013.

Adolfo Cárdenas es un autor de culto en la ciudad de La Paz, y su homenaje a los antros, la vida nocturna y el habla popular, su “ópera Rock-ocó”, es una de las más conocidas, difundidas y vendidas en el país. Se la ha presentado en teatro, se han hecho grafitis en su nombre y, también se la ha adaptado a la novela gráfica. Susana Villegas y Álvaro Ruilova, (con la asistencia de Oscar Zalles en entintado y finalización de bocetos), se dieron a la titánica tarea de adaptar una obra llena de decires populares, onomatopeyas y descripciones fabulosas al noveno arte.

La historia sigue las peripecias de dos policías: el teniente Villalobos y su asistente Severo Fernández, mientras buscan al posible testigo de un crimen: el Maik. Éste se refugia en diversos vericuetos de la ciudad, desde bares afro-yungueños; prostíbulos; bebederos de alcohólicos empedernidos, cuevas de cleferos, fiestas populares y demás antros de la periferia. Las imágenes que se invocan son una sucesiva muestra de la maestría en el dibujo de estos dos grandes de la historieta nacional (no por nada a Susana la conocen como “la Dama del cómic boliviano”), para muestras bastan la terrible masacre de los perros, realizada por Ruilova, y el viaje “cleférico-iniciático” diseñado por Villegas, ambos parte del libro. En sí, cada viñeta tiene detalles y situaciones que entusiasmarán a los lectores. Una obra adulta y sugerente, que demuestra las inmensas posibilidades de nuestra literatura e historieta nacionales.


Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *