Gunnm, de Yukito Kishiro


Por: Jordi Querol, tomado de Zona Negativa

Sinopsis: Un cibermédico recoge en la Ciudad de los Desperdicios lo que queda de un cyborg construido hace siglos. Por suerte, el cerebro está intacto, aunque ha perdido la memoria, y le proporciona un nuevo cuerpo, un nuevo nombre y una nueva vida. Gally, que así se llama el androide, quedará muy agradecida a su mentor y particular Dr Frankestein, pero pronto se verá impulsada a luchar, como si fuese el último reducto de lo que queda del antiguo ser que fue quizá hace 200 años. Así se alejará de su amado padre adoptivo para recorrer mundo, conociendo gente y experimentando todo tipo de sensaciones. Mientras un horripilante secreto es revelado, ella tendrá que aprender a responsabilizarse de sus actos y evitar su propia desintegración física y mental junto la de la de los habitantes de la superficie y los de la enigmática Salem, bajo una amenaza terrorista de alguien muy próximo a ella misma.

Entre líneas: Tengo que admitir que ha sido un arduo trabajo leer los 12 tomos que componen esta obra, y no por su calidad, que es excelente, sino por el innombrable numero de conceptos e ideas que apunta la historia, repleta de notas al margen explicando o definiendo conceptos que el autor ha querido introducir. Desde Nietzsche hasta la literatura de los siglos XIX y XX, pasando por la psique humana manejando conceptos como el ki o el karma de una forma tan fácil como quien se moja los pies a la orilla del mar haciendo rebotar la pelotita de playa con la pala de madera. Incluso nos encontramos apéndices enteros de varias páginas al final de algunos tomos con bocetos, datos técnicos, etc que complementan a la perfección todo lo que vamos aprendiendo en la historia propiamente dicha.

Por lo tanto, la única forma que me queda de describir este cómic y que veáis su calidad es reduciendo todo el problema a una sola cuestión: qué es Gunnm? Pues Gunnm nos explica la vida de Gally, desde su nuevo nacimiento a manos de Ido hasta su enigmático final, en el que le perdemos el rastro. En el contenedor que se convierte este espacio de tiempo veremos cómo evoluciona el androide/ciborg/humano. Gally disfrutará y sufrirá todos los estatus por los que pasa un ser humano: reirá, llorará, se enamorará, se deprimirá, en definitiva evolucionará pasando por toda una gama de grises que ya quisieran tener muchos de los humanos que pululan por este mundo creado por el autor.

En efecto, Alita/Gally será mucho más humana que la mayoría de seres de carne y hueso que buscan su sitio en esa ciudad hostil. Como si estuviésemos subidos a un vagón de una montaña rusa, iremos con ella más allá de las nubes, donde el Sol te golpea en la cara sin interferencias, y te sientes vivo y alegre, para instantes después bajar precipitadamente hasta el más lóbrego y deprimente estado de ánimo, rodeado de ratas inmundas, encerrada en una habitación oscura de su mente deseando poder acabar con todo. Estas experiencias se irán acumulando y para bien o para mal se usarán a lo largo de la historia, creando la sensación de aprendizaje de la vida continuo, y no como en otras historias, que al finalizar una “saga” parece olvidar todo lo aprendido y/o sufrido anteriormente. Aunque curiosamente, varias veces son las que Gally empieza desde cero, desde tabula rasa, como queriendo experimentar todos los caminos posibles dentro del ser humano, pero no puede evitar que los conocimientos anteriores le influyan en sus acciones.

Y toda esta vida, donde se desarrolla? Pues bien, si el complicado carácter de la luchadora Gally es uno de los aciertos del manga, su enmarque dentro de un escenario concreto es otro punto fuerte: empezamos la historia en la Ciudad de los Desperdicios (CD), que recibe el nombre por ser la ciudad que está debajo (literalmente) de Salem, una ciudad colgada en el vacío, sostenida por un largo tubo que se eleva hacia el firmamento y se pierde en la oscuridad e inmensidad del negro velo encima de nuestras cabezas. Situada en un futuro en el que su pasado ha sufrido guerras espaciales (¿nuestro futuro?), esta ciudad de los desperdicios recibe todos los restos que sobran de la ciudad flotante, y se refiere tanto a la cantidad de basura que se acumula en su imposible e inexistente planificación de callejero como a la calidad de sus habitantes: siempre según la vista de los honorables ciudadanos de Salem, en la CD sólo pueden vivir los deshechos humanos, lo peor de la raza, a los que ni se considera habitantes ni tan sólo pueden soñar en acceder a ser parte de la elevada Salem.

Pero curiosamente Salem necesita la CD para sobrevivir: ahí se encuentran las numerosas fábricas que reciben los productos y alimentos provenientes del exterior de la CD, y de dónde se envían a Salem a través de unos grandes conductos kilométricos que se elevan hasta llegar a la elitista ciudad. Ah, y si a alguien se le había ocurrido, es imposible acceder a Salem a través de los tubos: unos peligrosos aros de metal se activan cuando se detecta un intruso y bajan hasta la CD para borrar cualquier resto de rata que se haya podido colar por la parte superior de los conductos, dejando un rastro de sangre y restos humanos o metálicos a su paso. Y qué hacen los habitantes de la CD? Pues nacer, vivir, reproducirse, y morir sin hacer mucho escándalo. Vigilados por una especie de policía de Salem, son autosuficientes dentro de lo que cabe, junto con la basura que reciben de la ciudad flotante, tienen sus reglas, sus ídolos y sus deportes de masas.

Está claro que esta jerarquía es una metáfora de nuestro mundo actual: el primer mundo, exclusivista, orgulloso, arrogante, abusa, explota y a la vez ignora al tercer mundo, que sobrevive como puede. El famoso asunto actual en España y en general el primer mundo de la inmigración ilegal que llega en pateras o lo que se llama ahora cayucos lo vemos representado en la historia en la diferencia física imposible de superar por la altura a la que está situada Salem, aparte de la prohibición explícita de volar bajo peligro de muerte instantánea por parte de la policía que vigila constantemente el cielo de la CD. El primer mundo, a través de rutas comerciales, explota los pobres y desvalidos, creando una diferencia cada vez más grande, donde cada vez hay pobres más pobres y ricos más ricos.

Esto se ve claramente en la historia donde no existe el término medio, aunque los más aventajados de la CD pueden ser los comerciantes que controlan las rutas de importación de alimentos y su gestión con las fábricas y los tubos que abastecen Salem. Y mientras, los habitantes de la superficie no tienen nada más que hacer que vivir y morir, sin molestar demasiado al sistema.

Este escenario, lejos de tomar protagonismo en un momento concreto (excepto en la saga de Yugo), está siempre presente, mudo pero activo y tiene un peso específico en la historia. Gally, en su aventura vital, pasará de ser una cazadora guerrero dentro de la CD, a ser una espía de Salem, aunque sólo con un único objetivo (no, no revelo nada, tranquilos). Aunque se haya repetido mucho, se puede afirmar sin ningún tipo de miedo a equivocarse que el escenario es un protagonista más, donde una vista general de Salem y la CD se nos antoja como un pulpo que alarga sus viscosas extremidades hacia la presa para dejarla seca, succionándole la vida e inmovilizándola para tenerla bajo su poder a su antojo. Claro que cuando nos enteremos del secreto mayor guardado de Salem las cosas cambiaran mucho, y nos plantearemos el orden de muchas cosas, tanto dentro de las páginas de este magnífico manga como de nuestras propias vidas.

Hay obras que definen y monopolizan a un autor. Si George Lucas acertó de lleno con la saga Star Wars, o el mismo Toriyama con Dragon Ball, se puede decir que Kishiro es Gunnm, y viceversa. En todas estas obras nos queda la sensación de que el autor podría dedicarse años a explicar historias para rellenar los vacíos que dejan sus largas líneas temporales. Porque Gunnm no son sólo estos 12 tomos: en la buena edición definitiva de PdA (más en contenido que en calidad de edición, que es normal sin tirar cohetes) nos damos cuenta que el propio autor desarrolla un universo propio no sólo para lo que va a contar, sino para los años precedentes y los siguientes al momento temporal que nos ocupa. En efecto, después de no triunfar demasiado con sus siguientes proyectos, Kishiro volvió a su obra magna para continuarla con Gunnm Last Order, que repasaremos justo cuando acabemos con la actual. Pero nos deja la sensación de que si la inspiración no le hubiese abandonado, nos podría haber regalado maravillosas historias Pre-Gally: el inicio de la CD y Salem, la división en clases, o incluso reencontrarse con Gally en su anterior vida, de lo que a la postre poco sabemos al final de esta serie.

Quizá este sea el único fallo destacable de la obra: después de inundar la última parte de la serie con conceptos de difícil comprensión (pero totalmente disfrutables), y con el inesperado desenlace, nos damos cuenta que la propia Gally y nosotros mismos no hemos descubierto mucho de su pasado. Mala planificación del autor? Realmente había una historia anterior más allá que cuatro flashbacks poco aclaratorios? Lo dejó para Gunnm Last Order? Por las noticias que nos llegan, lo dudamos. Lo poco que llegamos a tener claro es que las imágenes de su pasado brillan por un momento en su cerebro en situaciones críticas de miedo, venganza, abocamiento a derrota absoluta o en modo berserker.

Pero estas sombras no tienen porque minimizar la calidad de esta historia. Hemos hablado de refilón de la edición actual y de una anterior. La popularidad del manga en España en los primeros años de la invasión otaku recayó básicamente en Dragon Ball, como ya sabéis, y de forma más minoritarias en otras buenas series que se publicaron por aquél entonces, como Ranma ½, Patrulla Especial Ghost, El Puño de la Estrella del Norte, o Bastard! Pero mientras muchas series buenas tenían que ser canceladas por falta de ventas (en ese momento se publicaba en comic books con tapa de cartón, 24 paginitas o pocas más, con papel malo y aumentando el tamaño de los dibujos originales), había alguna serie aparte de DB que sobrevivía mes a mes: una de ellas fue Gunnm, publicada en ese momento como Alita, Ángel de Combate.

La serie se dividió en varias series limitadas, de distinta numeración cada una. Así, se llegaron a publicar 6 partes de la serie, aunque muchas veces no había pausa entre una serie limitada y la siguiente, que aparecía al mes siguiente con un nuevo numero 1. La serie se publicó completa, y cuando se cerró se tenía la sensación de que se había acabado un ciclo, un pensamiento negativo pero a la vez felices por haber podido acabar una serie larga en un país donde a la mínima cancelaban las series sin previo aviso. Personalmente no llegué a leer los seis volúmenes (que los tengo), pero en ese momento ya me gustó la historia. Esta edición es actualmente muy difícil de encontrar, sobretodo la primera parte, totalmente desaparecida del mapa.

El resto de volúmenes aún pueden seguir pululando por viejas cajas en tiendas o mercados de segunda mano. Por eso PdA tuvo la gran ocurrencia de publicar en España la última edición definitiva que se había hecho en Japón, llena de notas al margen y aclaraciones varias, con decenas de hojas llenas de bocetos de varios personajes, y no sólo eso, sino también explicación de técnicas de ataque y defensa, historias paralelas, y explicaciones de merchandising, como por ejemplo los videojuegos basados en el manga. A medida que vas pasando las páginas te das cuenta de que tantos asteriscos en los bocadillos y de tanta nota al margen solo se puede deducir que se nota que el autor domina muchos campos, o se ha documentado muy a fondo, ya que llega a ser abrumadora la cantidad de cosas que nos explica, la mayoría enmarcadas dentro de la ciencia ficción, siendo algunas de ellas realmente útiles si se pudiesen llevar a cabo.

Como apunte para que podáis adivinar el nivel de detalle en las explicaciones os diré que escribiendo pensamientos, conceptos y desvaríos varios que me producía la lectura de tanta información rellené 4 hojas de Word. Pero contrariamente a lo que podéis estar pensando toda esta parafernalia y caparazón de aclaraciones y complementos de información no entorpecen la lectura, sino que la hacen muchísimo más rica que cuando la leímos por primera vez en la desaparecida edición de PdA.

Está al mismo nivel que el autor más famoso en el tema de notitas al margen (dejando de lado los dibujitos al margen de Sergio Aragonés xD): Masamue Shirow. Si Ghost in the Shell es compleja pero conseguí completarla y disfrutarla, Orion la abordé en la misma época y no conseguí pasar de las primeras páginas de su críptico planteamiento. Ahora, habiendo superado el test de Gunnm, quizá esté más preparado para afrontar esta historia de Shirow. La diferencia entre los dos autores es que con Kishiro disfrutas de sus aclaraciones, con abundante información pero explicada de forma entendible, mientras que Shirow “esconde” información en esos pies de página que podrían aclarar puntos confusos, con lo que leer sus mangas es más una suposición de lo que quiere explicar que una certeza de lo que estamos leyendo.

Ya que la historia está repleta de conceptos de ciencia ficción y de otros como la literatura, nos gustaría hacer un segundo post analizando un poco por encima los conceptos más importantes para la comprensión de la historia, siempre que la dirección de la web lo considere oportuno. Y no sólo conceptos, sino algunos personajes clave que aparecen en el último arco argumental que aglutinan en su persona distintas filosofías o puntos de vista de enfrentare a la vida.

Otro tema que nos gustaría tratar en ese otro post son las teóricas diferencias entre el desenlace que se vio en la primera edición de la serie en PdA y la actual. Kishiro, para poder continuar su obra magna, tuvo que cambiar el rumbo de la historia desde cierto punto. Intentando evitar spoilers o convirtiendo el texto en uno de ellos especialmente grande, compararemos las dos ediciones para ver a partir de qué punto decidió cambiar el rumbo de la vida de Gally, y si es en el momento que creemos, no le supuso un simple cambio de dibujo sino un replanteamiento total del último arco. Pero esto será es una próxima ocasión, si todo sale bien.

Valoración: Bueno, pues para acabar me parece que no hace falta ser muy avispado para adivinar que le daremos una nota alta, verdad? Si de la lectura de parte de los primeros volúmenes de la primera edición de Planeta nos vienen buenos recuerdos, releerla en esta edición definitiva es redescubrirla y leer algo totalmente nuevo y distinto a lo que habíamos experimentado a principios de los 90. Y es una gozada. Os daréis cuenta de que no hemos hablado del dibujo, simplemente porque es una maravilla, lleno de detalles, con un perfecto dominio de la anatomía, la física (atención a las mareantes sesiones de Motorball), la sensación de velocidad pero también de recogimiento.

A esto se le une una fabulosa capacidad de cambiar de ambiente como quién chasquea los dedos, y es sólo una de las facetas de un extraordinario guión, muy bien amueblado y planificado desde el principio, que dividido en 3 o 4 arcos, sube en intensidad a cada uno de ellos siendo el último apoteósico, metiendo toda la carne en el asador con unos Desty Nova y Kaos (grandísimo personaje digno de estudio pormenorizado) en máxima esplendor. Nos dejamos muchas cosas en el tintero, como el ajustado y típico humor japonés en los fondos de las viñetas, las historias paralelas al final de algunos tomos (hechas con anterioridad, notándose en la calidad del dibujo, reconocible pero más primerizo), etc

Este manga gustará a aficionados a la ciencia ficción, a las aventuras, a las armas (detalladas descripciones de armas y balas inventadas o de algunas reales), al motor (los gadgets que usa la Gally espía como motos son espectaculares), a los amantes de la guerra (hay pequeñas dosis de estrategia), a los mechas (atención a la gran diversidad de androides, cyborgs de toda clase y dimensiones), a la cibernética (acoplamiento y comunicación entre un ser vivo de carne y hueso y partes mecánicas), etc, y simplemente, a todo quien quiera leer una muy buena historia de superación personal. Os recomendamos que os hagáis con los primeros tomos de la ya no tan nueva edición de PdA (lleva ya cuatro años en el mercado), en el que el primer tomo ya encontramos suficientes razones como para comprarlos todos pero para que veáis por donde van los tiros comprad los 4 primeros (y os dejará expresamente con la miel en los labios en medio de una fantástica carrera de Motorball), estamos seguros que poco tardaréis en volver a al tienda y pedir el resto. Dejando de lado un par de fallos sin importancia, solo podemos concluir, parafraseando al mad doctor Desty Nova, que este manga es….. DELICHIOOOOOOCHOOOOOOO!!!!!


Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *